Con la zona de descenso ya lejana, en el horizonte aurirrojo está la chance de meterse en el reducido y seguir en carrera por el ascenso.
Boca Unidos volvió a los entrenamientos con los ánimos renovados, producto de dos victorias consecutivas (lleva tres fechas sin caer) y sabiendo que el objetivo de salvar la categoría luego de una mala campaña va quedando atrás.
Lo que hace apenas unas semanas atrás era una utopía hoy es una posibilidad matemática posible: meterse en el reducido donde estará en juego el único ascenso que otorga la categoría para la Primera Nacional. Si bien es complicado, Boca Unidos puede encarar la parte final del Torneo Federal A mirando la tabla de arriba.
Con ese panorama, los dirigidos por Roberto Marioni comenzaron los preparativos para un cotejo complicado como el que le depara la 31ª fecha de la zona Norte: Central Norte de Salta como visitante.
El Aurirrojo llegará a este cotejo con un envión anímico importante tras haber doblegado a Defensores de Pronunciamiento y a Unión de Sunchales, pero además con la posibilidad de reafirmar una formación inicial que se repitió en los dos últimos cotejos y que le dio buenos resultados al entrenador.
En el comienzo de la semana, y tras la evaluación de rutina a los jugadores, todo hace prever que Marioni podrá volver a contar con los nombres que eligió y a los que le dio confianza para revertir la delicada situación que atravesaba el equipo tres fechas atrás.
Como sucede habitualmente, la labores regenerativas fueron tarea para quienes sumaron minutos el último fin de semana, mientras que el resto de los futbolistas realizó un ensayo formal por algunos minutos. Hoy el quehacer del plantel tendrá que ver ya con los tácticos, labores con pelota y algunos minutos de fútbol en espacios reducidos en la previa de los que será la práctica formal de la semana.
El DT de Boca Unidos apostó a una suerte de rotación que le funcionó, quizás sin un juego vistoso pero sí efectivo. La base inicial resguarda a algunos referentes y hombres de buen pie, una estrategia que busca desgastar al rival de turno para la etapa complementaria en la que Marioni tira toda la carne al asador.
Sucedió en Pronunciamiento y también el pasado fin de semana en el Leoncio Benítez. El combativo mediocampo inicial ofrece resistencia al rival, lo controla y lo desgasta. Por su parte, los desequilibrantes generadores de juego de la parte final logran mayor profundidad y situaciones de riesgo.
El argumento es válido y por ahora dio resultados, más aún si la chance de llegar a meterse en los puestos de clasificación es posible cuando restan cuatro jornadas para el final.
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