Tras las revelaciones de la primera parte sobre la desaparición de Marcela Basteri, el final del segundo capítulo dejó en vio a todos sus fans. ALERTA SPOILER.
La historia del segundo capítulo de Luis Migue, la serie se sitúa nuevamente en Madrid, en 1992, y en desesperada búsqueda del cantante por descubrir qué pasó con su madre, Marcela Basteri. Esta nota contiene spoilers.
En el primer episodio, que se estrenó el domingo 17 de abril en Netflix, se revela una acalorada discusión que tuvo Luis Miguel (Diego Boneta) con Tito (Martín Bello). Ahí, el primo de Luisito Rey esboza que “fue un accidente” y le pide al cantante que busque a Basteri en la casa de Las Matas, dando a entender que la mamá de Luis Miguel murió y está enterrada en ese terreno de Madrid.
Ante la imposibilidad de acceder a la vivienda, que se estaba ocupada por otra familia, Luis Miguel le propone al Mossad comprarla y hacer el procedimiento de forma legal.
En paralelo, la historia retoma el accidente que sufrió “Micky” cuando le explotó un audífono en el oído izquierdo y tuvo que ser internado de urgencia. Es su mejor amigo, Mauricio Ambrosi (Fernando Guallar), quien juega un papel fundamental en las escenas, acompañando al cantante en uno de los momentos más difíciles de su carrera.
Nuevamente en 1992, la vida personal de Luis Miguel lo atormenta. Su novia, Erika (Camila Sodi), con quien mantuvo una relación de varios años, decide dejarlo e irse a Estados Unidos. En tanto su mánager, Hugo López (César Bordón) le recomienda abandonar la investigación por el paradero de Marcela Basteri, y “Micky” afronta una encrucijada.
Tras un emotivo momento entre Luis Miguel y su hermano menor Sergio, el cantante le comunica al Mossad que decide finalmente abandonar la búsqueda de su mamá en la casa de Las Matas.
En medio de las grabaciones de “Aries”, Patricio Robles (Pablo Cruz Guerrero) se incorpora al equipo de trabajo del cantante y decide aportar su máximo potencial para que el disco sea una gloria.
Así, entre miles de canciones, descubre “Hasta que me olvides”, escrita por Juan Luis Guerra, canción que se convertiría en un éxito absoluto y que llega en un momento crucial en la vida de Luis Miguel.
En paralelo, a sus 22 años, el cantante decide conocer a su hija: Michelle Salas (Macarena Achaga), fruto de su relación con Stephanie Salas.
Fuente: Minutouno.com
