Un total de 16 jovencitas eran inducidas a brindar servicios íntimos a visitantes a cambio de dinero. Las utilizaban una pareja de proxenetas con ayuda de remiseros y hasta guías de pesca. La Policía Federal Argentina los detuvo por el delito de trata de personas.
La Policía Federal Argentina (PFA) desarticuló una asociación ilícita que incurría en el delito de trata de personas y promovía el denominado "turismo sexual", explotando a 16 mujeres jóvenes que fueron rescatadas en una serie de allanamientos en la capital provincial y la localidad de Paso de la Patria.
Diez hombres y una mujer permanecen detenidos. Entre ellos hay remiseros, guías de pesca y al menos dos proxenetas que digitaban el "negocio".
Mediante esta operatoria obtenían enormes ganancias de dinero, las cuales pretendían duplicar aprovechando el fin de semana largo y la masiva afluencia de turistas, muchos de ellos extranjeros.
La PFA, a través de su División Unidad Operativa de Investigaciones Especial Corrientes, allanó el sábado un total de nueve domicilios. Algunos en la ciudad de Corrientes y el resto ubicados en la villa turística.
Con seguimientos, intervenciones telefónicas y otros métodos de pesquisa los federales detectaron "el organigrama criminal" de esta banda.
Los once implicados "se encargaban de regentear a las mujeres especialmente jovencitas (mayoría estudiantes universitarias), las cuales eran engañadas por los tratantes respecto al dinero recibido", explicaron desde la fuerza de seguridad.
Dentro de esa cadena algunos cumplían el rol de "traslado de las víctimas hacia los lugares acordados a fin de realizar los encuentros sexuales". Ellos son remiseros y recibían el dinero por parte de los clientes. En este sentido apuntaban a los turistas.
Para que los visitantes tuvieran conocimiento de la oferta sexual actuaban algunos guías de pesca. Estas personas recibían una porción de las sumas conseguidas a costa de las mujeres explotadas.
"Una vez finalizado el servicio por parte de las mujeres el pago a ellas era una cifra muy pequeña", la cual "no se comparaba" a lo cobrado por los conductores de vehículos a los ocasionales clientes. Algunos de los pagos eran en dólares.
Los guías de pesca apresados tenían contacto permanente con los proxenetas. A ellos informaban la cantidad de mujeres que deseaban tener los turistas y "es allí que le enviaban un álbum de fotos que los tratantes tenían en su poder, para que los clientes pudieran elegir a las mujeres como un objeto sexual".
A lo largo de la presente investigación compleja se pudo comprobar todo lo antes mencionado, mediante comunicaciones a través de intervenciones telefónicas, filmaciones en las que se comprueba el traslado de las mujeres a los diferentes encuentros sexuales y en cuanto a ello, fue documentado y puesto a disposición ante el Juzgado Federal 2 de Corrientes.
Con toda la evidencia, el juez dispuso los allanamientos, registro y detención de todos los responsables.
De las 16 jovencitas rescatadas de esta red, la mitad estaba adentro de una vivienda a la espera de futuros encuentros sexuales. Las demás fueron localizadas al momento de sus traslados por los investigados, quienes simulaban realizar viajes comunes en remises. La mayoría de los encuentros íntimos ocurrían en Paso de la Patria.
Para concretar los allanamientos simultáneos e interceptación en vía pública, los efectivos de la División Unidad Operativa de Investigación Especial Corrientes tuvieron la colaboración de las Delegaciones de PFA de Goya, Formosa, Sáenz Peña, Resistencia, Paso de los Libres y Posadas.
Siete vehículos; gran cantidad de dinero en pesos y moneda estadounidense; dos armas de fuego; plantas de marihuana; celulares; computadoras; anotaciones varias y documentaciones fueron secuestrados.
Las mujeres rescatadas quedaron contenidas en todo momento por funcionarios de la Oficina de Rescate de Víctimas de Delito de Trata de Personas.
Diario Época
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