Ocurrió en la tarde del sábado, día del trabajador, y se realizó una exposición policial donde se habría negado a realizarse el test de alcoholemia por dosaje sanguíneo, aseguró el abogado de la otra parte involucrada.
El intendente de Esquina, Hugo Benítez, protagonizó un incidente de tránsito en el que casi atropella a una mujer y su hija pequeña mientras conducía en aparente estado de ebriedad. Ocurrió en la tarde del sábado, día del trabajador, y se realizó una exposición policial donde se habría negado a realizarse el test de alcoholemia por dosaje sanguíneo, aseguró el abogado de la otra parte involucrada.
Alrededor de las 16.30, Diego Jesús Pereira iba junto a su pareja e hijos, uno de ellos, una bebé de cinco meses, a pasear a la plaza Pescio de esa ciudad. Cuando estaban terminando de cruzar una calle, escucharon acercarse un vehículo a alta velocidad. La familia alcanzó a esquivarse y la camioneta Hilux blanca pasó a centímetros de la mujer y el cochecito de la bebé, lo que les causó una fuerte conmoción, especialmente en el otro niño ya que tiene Trastorno del Espectro Autista (TEA).
El conductor de la camioneta era el intendente Hugo Benítez. "Aminora la marcha más adelante y me hace ademanes. Lo miro y me quedo mirando a mi hijo que tiene TEA, se alteró mucho, igual que mi señora que casi recibe el impacto", explicó Pereira. Tras comprobar que nadie estaba herido, la familia se puso en marcha para llevar al niño a lo de un familiar cercano para entrar en calma.
En el trayecto, Pereira realizó una publicación en su perfil de Facebook donde contó sucintamente la situación y acusó a Benítez de conducir presuntamente alcoholizado.
"Sigo caminando para llevar a mi hijo y en la calle Rivadavia entre Mitre y Schweizer, veo que se me acerca fuerte de nuevo la camioneta y clava los frenos. Cuando abren el vidrio del acompañante, veo que era el intendente", contó Pereira y agregó que allí comenzó un intercambio con fuertes insultos y amenazas.
"Baja la ventanilla y él y la novia lo empiezan a agredir. Le dicen de todo, que lo van a meter preso, matar, insultos de todo tipo", comentó a República de Corrientes el abogado que representa a Pereira, Norberto Fernandez Codazzi. "Tenía signos de que estaría ebrio, aparte estaba muy agresivo", agregó.
De ahí, Benítez se dirigió a la comisaría primera de Esquina donde intentó realizar una denuncia contra Pereira y su familia. Como no hubo un delito concreto ni lesión física, en la comisaría iniciaron una exposición por parte de Benítez pero cuando llegó el bioquímico legal para realizarle el dosaje alcohólico sanguíneo, el intendente se habría negado, según confirmó Codazzi. "Fueron los de tránsito y le hicieron el test de aliento pero sería totalmente nulo, además, cómo los mismos empleados municipales le van a practicar el test de alcoholemia, es absurdo", calificó el letrado.
Benítez declaró en su exposición que se ponía a disposición de la Justicia por la denuncia pública hecha por Pereira, y que por prescripción médica tiene prohibido ingerir alcohol.
Detrás llegó Pereira y enseguida su abogado Codazzi, para realizar el descargo. A todo eso, ya estaban en la comisaría el secretario de gobierno, Luis Ojeda, y el jefe de Tránsito municipal, según indicó Codazzi. "Hicieron un despliegue frente a la comisaría para hacerle presión a mi cliente. Un abuso de poder que ejerció sobre todo el secretario de gobierno", indicó el representante.
Finalmente, alrededor de las 19, Benítez y su pareja se retiraron de la comisaría en medio del despliegue de personal municipal. Se fue como había llegado, manejando su camioneta.
"Estuvo el fiscal también, no hay delito. Fue una imprudencia al volante, pudo llegar a ser un dolo eventual, por centímetros no le agarra al carrito del bebe. Iba a 80 o 90 kilómetros por hora fácilmente", calculó Codazzi según el relato de los damnificados. "Les salvó el ruido de la camioneta y los bocinazos", agregó.
El abogado, quien actuó ad honorem, manifestó que la familia "podría accionar por daños morales, por el pánico sufrido y los insultos" y destacó el accionar del personal de la Comisaría Primera. "La policía se portó muy bien, fueron muy objetivos", aseguró.
FUENTE Y TEXTO - REPÚBLICA DE CORRIENTES
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